Todo en la ciudad de Gante parece tener un carácter especialmente único, y el barrio de Patershol no es una excepción.
La entrañable, histórica y nostálgica zona ha tenido sus altos y sus bajos, siendo hoy un lugar por el que apetece pasear.
Además, se encuentra solo a unos 10 minutos a pie del ayuntamiento.
¡Puedes adentrarte en este distrito muy fácilmente!
Así que, si a tu paso por la ciudad te apetece ver algo distinto, ir a un sitio en el que disfrutar de sabores exquisitos y contemplar lindas calles, no puedes perdértelo.
¡Explóralo con nosotros!
Conoce el pasado del barrio de Patershol
No todo lo que reluce es oro y eso cobra mucho sentido en Gante.
¡En especial en la zona que nos ocupa!
Porque antes de ser el acogedor y hermoso distrito que te acompañamos a conocer, fue un lugar con un carácter muy diferente.
El barrio de Patershol queda separado del resto del centro por el canal del río Lys.
A pesar de que hoy es una de las mejores postales de la ciudad, que por aquí pasara este cuerpo de agua fue un arma de doble filo para el barrio.
Su momento más oscuro
Antes de explorar esta parte de su historia, tenemos que irnos al siglo XII, cuando se levantó el castillo de los Condes de Flandes y estos vivieron ahí.
Entonces se empezó a formar el barrio.
Después, en los siglos XVII y XVIII, llegaron los burgueses y gente acomodada que encontraban su sitio en el distrito, creando así un aura de bonanza.
La situación se mantuvo hasta el siglo XIX, cuando la Revolución Industrial lo sacudió todo.
Gante se conoce por su tradición textil.
Y en el barrio de Patershol los trabajadores del gremio de tejedores encontraron un buen lugar para establecerse.
Que en la ciudad llegara a haber unas 1 500 fábricas y que muchas textiles se congregaran alrededor del río Lys para verter los desechos hizo que la contaminación subiera.
Así, Patershol fue, durante gran parte de los siglos XIX y XX, un suburbio marginado al cual iban a parar los trabajadores menos favorecidos.
Sin embargo, la situación cambió en gran medida en los años 80 del siglo pasado.
¿Solo se puede pasear en el barrio de Patershol?
Hemos llegado a la época en la que, poco a poco, Patershol acogió más y más restaurantes, cafeterías y bares.
¡Eso contribuyó a su remodelación!
Porque, además de esta nueva oferta gastronómica y cultural, también se iniciaron las obras de renovación de los edificios que quedaron en condiciones insalubres.
Y ahora puedes disfrutar de uno de los lugares más atractivos de Gante.
Que, por cierto, ¡es ideal para visitar en una romántica cita en pareja!
Pero si pasear te sabe a poco, te dejamos otras actividades para explorar el precioso barrio de Patershol.
Disfruta de la meca gastronómica de Gante
Te vamos a ser sinceros: perderte por las callecitas empedradas, angostas y decoradas con casas bajas tan típicas del pasado medieval de Bélgica, es de otro nivel.
No solo porque podrás disfrutar del ambiente tranquilo y relajado que ofrece esa esencia tan única.
Sino porque también tendrás la oportunidad de llenar la memoria de tu teléfono o cámara con recuerdos hermosos.
Y si todo esto lo haces buscando buenos sitios para comer o cenar, ¡será todavía mejor!
Porque resulta que Patershol es la meca de la gastronomía gantesa.
Con la renovación del barrio aparecieron restaurantes de varios tipos ofreciendo manjares de distintas culturas.
Si después de un tour por la ciudad te apetece comida japonesa, italiana, indonesia o turca, encontrarás varios lugares que ofrecen lo que buscas.
Además, también hay cafeterías y bares para todos los gustos.
Eso sí, no te puedes ir del barrio de Patershol sin probar algo tradicional belga.
De hecho, los típicos platos al estilo casero, «de la abuela», son muy populares entre los vecinos.
Tómate una cerveza con kroakemandels (guisantes fritos muy característicos de Gante) en el popular Café Folklore.
Prueba también el uufflakke, una especialidad de charcutería local con mostaza.
Conoce la parte cultural del barrio
En medio del entresijo de bonitas calles medievales que es Patershol también encontrarás actividades culturales que hacer, como por ejemplo:
- Visitar la Casa de Alijn: si te interesa indagar en la vida diaria de la ciudad en siglos pasados, aquí tienes una cita.
En el museo Huis van Alijn, así se conoce en neerlandés, podrás ver exposiciones y recreaciones con esta temática.
¡Llama la atención que el lugar era antes un hospital!
A propósito, en su hermosa cafetería puedes degustar los famosos guisantes fritos.
- Adéntrate en Kunsthal: también conocido como el centro Caermersklooster, antes era un antiguo monasterio medieval.
Ahora es una excelente plataforma para el arte, sobre todo para disfrutar de exposiciones de corrientes modernas.
¡Por cierto!
Visita el famoso Gravensteen o castillo de los Condes de Flandes, un imperdible en Gante y que hace de mediador entre el barrio de Patershol y el centro de la ciudad.
El mejor momento para descubrir el barrio de Patershol es siempre
Este distrito se vive durante todo el año.
Las tiendas, los bares, restaurantes y cafeterías brindan al empedrado del suelo un aire moderno, pero que se mezcla a la perfección con la esencia de la zona.
Sin embargo, si tienes la suerte de escoger las fechas de tu viaje, te recomendamos que visites Gante en el mes de agosto.
¡Porque en la primera quincena son las fiestas del barrio!
Durante esos días sí que vas a tener una buena oportunidad para sentir la verdadera atmósfera que la zona desprende.
Toda la ciudad mira al distrito, porque se organizan actividades, exposiciones, mercadillos y desfiles en un ambiente muy popular.Y si quieres seguir descubriendo Gante y el barrio de Patershol en cualquier otro momento del año, ¡te podemos acompañar con mucho gusto!
Imágenes | Guías y Tours, W. Commons, Holyblood