Al visitar la Grand Place de Bruselas, casi con total seguridad, el Ayuntamiento robará tu atención, pero también lo harán las casas gremiales.
Estos importantes edificios, tan característicos de la arquitectura, cultura e historia flamenca, no solo dominan el centro de la capital belga.
También se encuentran casas gremiales en Brujas o en Gante.
Sin embargo, además de admirar su belleza y elegancia, ¿te has preguntado alguna vez por qué se construyeron, cuál es su función o su historia?
Si las casas gremiales te generan curiosidad, has llegado al artículo indicado.
¡Descubrámoslas!
El centro de Bruselas, dominado por los comerciantes
La capital de Bélgica se conoce, además de por su chocolate, patatas fritas y otros platos, por ser el lugar al que acudieron varias personas relevantes en su exilio.
Sin embargo, no nos adelantemos aún, pues las casas gremiales ya existían antes de que la ciudad tomara esa fama.
De hecho, para conocer su origen, hay que irse hasta la Edad Media.
En este periodo, los artesanos y comerciantes se fueron agrupando para crear grupos que protegieran sus intereses.
Su objetivo era regular la oferta de un sector en concreto, formar aprendices o supervisar la producción.
Estos grupos se denominaron gremios, y los lugares en los que se encontraban y comerciaban, casas gremiales.
Florecieron hace mucho tiempo, y la mayoría ya no conserva su función original.
Sin embargo, se han preservado como joyas arquitectónicas.
El mayor núcleo de este tipo de edificios se halla en la región de Flandes.
En Bruselas, en concreto, en la Grand Place.
Los comerciantes de la ciudad levantaron las que hoy puedes ver, haciéndolas llamativas para mostrar la calidad y poder de sus gremios.
Además de esta huella de cultura e historia, se dice que la capital del país es también refugio de intelectuales.
Y es que, en épocas convulsas, algunas personas populares vivieron en las casas gremiales de la Grand Place.
Son ejemplos de ello el escritor francés Victor Hugo o el pensador alemán Karl Marx.
Conoce algunas casas gremiales de la Grand Place
Aunque los gremios se empezaron a formar en la Edad Media, las casas gremiales del centro de Bruselas presentan el estilo renacentista flamenco típico del siglo XVI.
Sin embargo, también podrás observar una buena dosis de barroco.
Esto se debe a que la plaza fue destruida en el 1695, y los gremios tuvieron que reconstruir sus sedes.
¿Te apetece conocer algunas casas gremiales?
Además de acompañarnos en un tour para visitar la «ciudad inesperada» y verlas en directo, aquí te presentamos algunas.
Maison du Cygne
La Casa del Cisne (esa es su traducción), es probablemente una de las más reconocidas por la herencia que nos deja.
La escultura de un cisne se encuentra elegante en su fachada.
Pero lo más interesante sucedió en su interior.
Además de albergar la sede del gremio de carniceros de la ciudad, también fue el hogar de Karl Marx.
El filósofo e intelectual alemán se alojó en el edificio desde 1845 hasta 1848.
Y lo más interesante es que ahí escribió, junto a Friedrich Engels, su obra Manifiesto comunista.
En la actualidad puedes ir a tomar algo al restaurante, donde se recuerda la presencia del filósofo, ya que lo frecuentaba asiduamente.
Cabe destacar también que, en la planta baja de su vecina, L’Étoile (Casa de la Estrella), hay un pasillo que da a la Grand Place.
Ahí se encuentra el monumento a Everard t’Serclaes, una curiosa estatua.
¡No te olvides de tocarle la mano para atraer la buena suerte!
Le Renard y Le Cornet
Estas dos casas, casi ocultas detrás de la sombra del Ayuntamiento, representan el gremio de los pequeños comerciantes y el de los astilleros.
Le Renard, la Casa del Zorro, se distingue por tener a este animal en su fachada.
De estilo barroco, si la miras con detenimiento verás cinco estatuas que se encuentran a media altura.
La del centro representa la justicia en el comercio, mientras que las otras se dedican a los continentes que se conocían en el siglo XVII.
Corona el edificio una estatua de San Nicolás que bendice a unos niños.
A su lado, se encuentra la Maison du Cornet.
La insignia de esta casa gremial es una corneta, y su decoración lo deja claro.
Anclas, timones y cuerdas representan a los que se dedicaban a construir barcos y se hacían a la mar.
Le Pigeon
Llegamos a otra de las casas gremiales más interesantes de la Grand Place.
Se trata de la Casa de la Paloma, que hasta 1659 fue la sede de los pintores.
Este gremio no pudo hacer frente al pago de la reconstrucción del edificio en su momento, por lo que lo vendió.
Años más tarde, en 1852, llegó a Bruselas el escritor y poeta francés Victor Hugo.
El autor de Los miserables acudió en busca de refugio debido a la toma de poder de Napoleón III.
Después de vivir allí varios meses, el escritor bautizó la Grand Place, inscrita en la lista del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, como «la plaza más bonita del mundo».
Hoy, este edificio barroco alberga una tienda de la famosa firma de chocolateros y confiteros Neuhaus.
Otras casas gremiales interesantes de la Grand Place
Hemos explorado edificios curiosos de ver y conocer.
Sin embargo, en el centro de la urbe, no son los únicos.
¡Una plaza tan grande no puede tener pocas casas gremiales, así que te mostramos algunas más!
- Maison des Ducs de Brabant: por mucho que la Casa de los duques de Brabante sea un nombre singular, este edificio albergó varios gremios.
Eran los menos favorecidos, los que no podían disponer de un inmueble propio y debían compartir su sede.
El nombre de la vasta construcción viene por los bustos de su fachada.
- L’Arbre d’Or: esta casa gremial que alude a un Árbol de Oro fue la ubicación del sindicato de los curtidores, de los tapiceros y, finalmente, de los cerveceros.
Hoy es el Museo de los Cerveceros Belgas, y si te gusta este tipo de bebida, es una parada obligatoria.
Vas a encontrar máquinas antiguas y grifos de varios estilos, además de poder acabar tu visita con una deliciosa cata.
- Maison du Roi d’Espagne: también conocida como Maison des Boulangers (la Casa de los Panaderos), pues albergaba su gremio.
Hay en la fachada diversas estatuas que personifican los elementos para la producción de pan.
Es la casa gremial más ancha de la plaza, lo que indica que el gremio de los panaderos era también el más rico.
Explora el encanto de las casas gremiales de la Grand Place
El viaje por la arquitectura e historia de los edificios que rodean la Grand Place es fascinante.
En algunos podrás degustar deliciosos platos, tomarte un rico café, visitar interesantes museos o hacer tus compras.
¡Las casas gremiales no se disfrutan solo por fuera!
Sin embargo, estos emblemáticos lugares esconden mucho más.
Cada construcción está llena de detalles, de curiosas historias e increíbles referencias.
Así que, si te apetece explorar estas joyas y otras maravillas de la capital belga, te esperamos en el próximo tour.
¡Conozcamos las casas gremiales juntos!
Imágenes | Guías y Tours, W. Commons