¿Qué sería de un viaje a Bruselas sin degustar los ricos y típicos dulces belgas?
En cualquier lugar siempre hay platos regionales que tienes que probar si no quieres perderte esa gran experiencia de la cultura local.
Por supuesto, es el caso de Bélgica.
Los dulces del país, consumidos a modo de postre, desayuno o pequeño aperitivo, también te cuentan secretos sobre su historia y cultura.
Y no, no quedan solo reducidos al chocolate o a los gofres.
Si vas a visitar Bruselas u otros puntos del país pronto, lee este artículo con atención, ¡tendrás unos momentos muy dulces!
Los clásicos: gofres y chocolate
Aunque solo pasaremos por encima, los gofres y el chocolate también se merecen una pequeña mención especial.
No te olvides de probar los otros dulces belgas que te comentamos aquí, pero degusta también estos productos tan populares y típicos:
- El chocolate belga es uno de los más famosos del mundo.
Aunque ya se usaba anteriormente, que se haya hecho así de popular se debe a Jean Neuhaus.
También a su nieto, Jean Neuhaus Jr.
El primero, farmacéutico, compró en las Galerías Reales de Saint Hubert un espacio para vender sus medicamentos.
Los recubría de chocolate para que tuvieran mejor sabor.
En 1912 su nieto decidió cambiar un poco la idea: en vez de medicamento, usaría otro relleno, más fino y agradable.
Así se creó el bombón.
La pastelería y confitería belga irían evolucionando, también con la marca Leonidas como otra gran referente.
La calidad ha acompañado al chocolate belga a lo largo de los años, convirtiéndolo en uno de los mejores del mundo.
- El gofre también constituye un dulce belga muy importante.
De hecho, ¡es uno de los desayunos por excelencia en el país!
Se sabe que ya en la antigua Grecia y en la Edad Media se empleaba la misma técnica para cocinarlos.
Una masa se ponía entre dos placas de hierro.
Pero fue en la época colonial cuando aquellos que viajaban a América desde Bélgica llevaron consigo una plancha de hierro de dos placas.
Desde entonces, el gofre se popularizó.
Además, han ido surgiendo variedades que disfrutamos en la actualidad, como el gofre de Lieja o el gofre lilés.
Los dulces belgas que tienes que probar en tu visita a la capital
Los dulces belgas se conocen alrededor del mundo por su exquisitez y calidad.
¡Los bombones, pasteles y tartas tienen una popularidad enorme, y con razón!
Son una parte indiscutible de la gastronomía del país, y en tu viaje a Bruselas te recomendamos encarecidamente que pruebes algunos.
¿Qué tal si te sumas a un tour con nosotros y te contamos dónde disfrutarlos?
Si no puedes esperar, empieza por los siguientes, ¡se te hará la boca agua!
Deliciosas galletas speculoos
El primer dulce belga que te presentamos es sin duda uno de los más populares en fechas navideñas.
Para conocer su origen hay que echar la vista algunos siglos atrás.
Se cuenta que, con la exploración del mundo, los belgas y holandeses que se aventuraban al mar empezaron a comerciar con especias.
Llevándolas a Europa y haciéndolas más accesibles, los artesanos panaderos y pasteleros experimentaron con ellas hasta que nació la speculoos.
Una galleta, tradicionalmente con formas que recuerdan a San Nicolás, que inunda los mercados navideños.
El punto fuerte de este dulce belga son las especias, en concreto la canela, el jengibre, la nuez moscada, el clavo y la pimienta.
¡Ese sabor a caramelo te encantará!
Cuberdons o neuzekes: curiosos dulces belgas con forma de nariz
Los cuberdons tienen una ciudad de origen que seguro que te suena: Gante.
Un farmacéutico gantés intentaba buscar un método para conservar sus medicinas.
Y resulta que dio con algo muy interesante.
Al usar jarabe azucarado, comprobó que este se cristalizaba, mientras el líquido que ponía en su interior seguía en buen estado.
Esto llegó a las confiterías, y de ellas, a nuestros días.
El cuberdon se hace con una capa de goma arábiga que contiene almíbar.
El original era de frambuesa, aunque ahora hay más sabores.
Si quieres probarlo tendrás que ir a Bélgica, ya que no se exporta.
Esto se debe a que el corazón líquido de la gominola se cristaliza a las pocas semanas de hacerse, impidiendo una conservación larga.
Para acabar, una curiosidad más sobre este dulce belga: también se le conoce por el nombre neerlandés de neuzeke, que quiere decir «nariz».
¡Este nombre se inspira en su forma cónica!
Mattentaart, de origen protegido
Si eres un amante de lo único y exclusivo, presta atención.
El siguiente dulce belga tiene incluso Indicación Geográfica Protegida, un título que le fue otorgado por la Unión Europea en 2006.
Significa que todas o la mayoría de las partes del proceso de producción se llevan a cabo en la zona que denomina la Indicación.
En el caso de la mattentaart, en la localidad de Geraardsbergen.
Este rico dulce belga está hecho a base de requesón con leche fresca de la ciudad de Geraardsbergen o del municipio vecino, Lierde.
Esta especialidad flamenca surgió como una receta para conservar el requesón sobrante del queso.
El mismo municipio estableció en el siglo XVII normas para su elaboración, y en el siglo XX se construyó un obrador en la plaza de la ciudad.
Esta tarta es uno de los dulces belgas que sí que se pueden exportar, pues se congela antes de cocinarse.
¿Qué tal si te llevas algunas a casa?
Rijsttaart, deliciosa tarta de arroz
¡Cerramos nuestras recomendaciones con una verdadera delicia!
El pastel de arroz o rijsttaart es típico de la provincia de Limburgo, su capital: Hasselt.
Como su nombre lleva a pensar, el ingrediente principal es el arroz.
Se mezcla con leche, vainilla, azúcar, cáscara de limón y huevos.
¡Queda un pastelito de hojaldre con un sabor inconfundible!
Disfruta de la gastronomía y dulces belgas de la mejor manera
¿Te hemos despertado el hambre?
¡No es para menos!
Hemos hablado de postres y dulces belgas ricos.
Quizá incluso sientas curiosidad por probarlos.
Para ello, intenta buscar un local especializado en el que hagan este tipo de recetas.
O también puedes visitar Bélgica y venir con nosotros de tour.
En Brujas degustaremos juntos algunos manjares del país.
Pasear por la ciudad y descubrir la rica gastronomía es un buen plan, ¿verdad? ¡Prepara tu paladar, vas a probar dulces belgas muy sabrosos!
Imágenes | Wikipedia, Bruselas Guías